martes, septiembre 25, 2007

Carta a la "izquierda" pro-Irán

Queridos lectores, estamos en la última semana de mis vacaciones, y he decidido dedicarme a algo que he tenido ganas de hacer estas últimas semanas. Se trata de una carta a una especie de personas especial para mi. Son un grupo que he logrado ponerme en contacto el en blog de Buena Prensa (heh, parece como si estoy dando demasiada publicidad para él), del cual tuve que debatir cosas tan simples como la existencia de la universalidad de los derechos humanos.

Este grupo de gente usa las teorías de un relativismo cultural para demostrar que "no se pueden aplicar los mismos criterios en todas partes". Eso forma parte de un patético intento de justificar los horrores inimaginables de un país opresor y repugnante como la República Islámica de Irán, aunque ellos, en su mundo de un lenguaje hipócrita y políticamente correcto, nunca admitirían. Pero existe algo peor que todo lo descrito aquí. Se tratan de personas que se hacen llamar "anti-imperialistas", que "defienden los derechos de las personas", y otras cosas hipócritas que los hacen llamarse "izquierda".

Pero con el discurso de Ahmadineyad en la universidad de Columbia ayer, creo que todo quedó más que descubierto y claro. Pues bien, empezaré la carta ahora:

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Queridos... La verdad es que no se cómo llamarlos: ¿Idiotas? ¿Ignorantes? ¿Malvados hipócritas que sacrifican sus propias ideologías por un odio irracional hacía Estados Unidos, sólo porque tienen una postura predeterminada que impide admitir que existen cosas peores que esa superpotencia?

No importa, lo importante es que aprendamos. Pues esta carta que les hago no es para castigarlos, ni para humillarlos. Sino para que aprendan una lección sobre el mundo. No sólo sobre la política o los temas que ocurren en nuestro entorno directo o indirecto, sino sobre toda la humanidad en su conjunto.

Pues bien. Analicemos por favor la frase más interesante de la entrevista del presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, en la universidad de Columbia en Nueva York. Pues dijo lo siguiente, respondiendo a la pregunta sobre la persecución contra homosexuales en Irán: "En Irán no hay homosexuales como en tu país (Estados Unidos). No existe este fenómeno en mi país. No sé quién te lo ha dicho".

Mientras que el público soltó una carcajada ante esta frase, Ahmadineyad no se rió ni un momento. Lo que ha dicho lo ha tomado muy en serio. Claro, vosotros también lo tomarían a carcajadas. Una anécdota de Ahmadineyad, que es presidente de Irán, y que no es tan grave, ya que si para él no existen homosexuales, entonces en su "condición cultural" de Irán, y que debemos dejar existir.

Pues si no lo notan, es algo mucho más grave de lo que parece. El no reconocer su existencia implica que los homosexuales de Irán no sólo que sufren persecución, sino ni siquiera son reconocidos como merecedores del derecho iraní. Su inexistencia como seres humanos implica precisamente eso: No son seres humanos. No tienen derechos humanos.

Pero la persecución no es algo novedoso. En el régimen de los Ayatollahs, que ya tiene 28 años de existencia, se han ejecutado aproximadamente 4000 personas con cargos de homosexualidad. En las propias leyes de Irán se incita a la ejecución de homosexuales por el delito de sodomía.

Parece como si a nadie se le ocurrió responderle a Ahmadineyad lo siguiente: Si no existen homosexuales, ¿porqué se castiga? ¿Qué relevancia tiene una ley si no tiene aplicación? Pues la razón es porque no sólo que existe, sino que con los comentarios honestos de Ahmadineyad, ni siquiera son considerados como seres humanos.

Y es que Ahmadineyad no es sólo una mera persona que tiene un apoyo limitado de la población. Es una persona electa por un sistema político que domina a Irán. Es el producto directo y claro de la revolución islámica de 1979. Fue siempre parte devoto de la revolución desde su juventud, y participó en los procesos más importantes de la revolución iraní durante los últimos 28 años. Y como a sacrificado su vida por este sistema, el sistema le recompensa con una elección a su favor de su liderazgo de gobierno, de tal forma que Ahmadineyad no es un simple mandatario pasajero. Es la personificación de la revolución islámica. Es el resultado definitivo, cuya función es perpetuar lo que lo creó.

Pero mi problema no es con Ahmadineyad. A pesar de todo, esa persona cree en lo bueno que es la revolución islámica. En que sus políticas son genuinamente positivas éticamente, y que por eso debe resistir a las presiones contra ellas, tanto fuera como dentro de su país. Pero dejando su personalidad de lado, considero yo que es peligroso confiar en una persona así. O al menos, apoyar esas posturas. No sólo porque estoy en contra de ellas, sino porque esas posturas esencialmente basadas en la religión que llevó a la revolución islámica iraní, no distinguen un termino medio. Lo que no cabe en su mundo dogmático simplemente no puede existir. Eso es, en definitiva, porqué Ahmadineyad dijo "no existen homosexuales en Irán". Para la República Islámica de Irán, sólo existe blanco y negro, mientras que lo razonable es aceptar que la realidad es una mezcla variada de gris.

Hablaré de la amenaza que supone el sistema iraní a la civilización humana en otra ocasión. Ahora, se trata de vosotros, que no ven maldad alguna en sus posturas. O al menos, no quieren verla. De vosotros que aceptan los crímenes con un cierto objetivo último. Que se creen mejores que aquellos que buscan cruzadas injustas abiertamente, cuando en realidad no lo son. Si, los que apoyan al régimen iraní proponiendo un "respeto" y "tolerancia" a la "soberanía" de los pueblos, mientras que se atreven a colocarse incluso cerca de una bandera mínimamente izquierdista y/o marxista. Los que critican a Estados Unidos por sus acciones imperialistas, pero no dudan en apoyar a Irán.

Mientras que dicen que ese es "problema de Irán", que nosotros, que vivimos en el "mundo occidental" (como muchos falsamente llaman a Europa y América), no deberíamos criticar a Irán por sus acciones, les pregunto: ¿Acaso los iraníes y los "occidentales" son tan distintos? ¿Acaso son tan ciegos que no ven lo que están apoyando?

¿Acaso no les recuerda esa frase de Ahmadineyad a un monstruo presente en la sociedad más cercana a nosotros? Pues yo veo exactamente lo mismo en la derecha cristiana. Vosotros la conocerán en movimientos xenófobos en Europa en contra de la "islamificación" de Europa, o en el infame "Bible Belt" (cinturón de la biblia) norteamericana. Irónicamente son las mismas fuerzas que dieron el apoyo al presidente norteamericano Bush a reelegirse en el 2004. Son esas fuerzas que permiten la permanencia del neoconservadurismo de Reagan y Thatcher.

¿No les parece irónico que personas que odian tanto a lo musulmán sean tan similares a Ahmadineyad? Irónico será, pero definitivamente es algo previsto. La religión no conoce de gris, sólo de blanco o negro. Por suerte, tenemos la capacidad de razonar en nuestra vida, y dejar de lado la intransigencia religiosa a favor de la cruda realidad gris.

Irán está dominada por una fuerza derechista que amenaza destruir todos los beneficios que las ideologías izquierdistas han logrado durante siglos. No cabe de sorprender que Irán es el principal país que persigue y aniquila todos los grupos marxistas dentro de ese país.

Dirían "pero Estados Unidos invade a otros países, e Irán no". Inmediatamente después indican algo como "Israel oprime a otros países, y ocupa territorios que no son suyos, etc. etc.", terminando con "Irán es un país soberano y su pueblo también. ¿Qué derecho tenemos a decir lo que deberían hacer o no? Eso es etnocentrismo".

Pues bien, si tanto defienden la "soberanía de los pueblos", entonces ¿porqué no defienden a la soberanía de los kurdos, brutalmente oprimidos por Irán? ¿Acaso no es una ocupación tan brutal como la israelí en Palestina? No, no lo es. Es incluso más brutal y genocida. Pero a vosotros no les importa, ¿verdad? Irán es un país que ha "resistido" el asedio imperialista norteamericano.

No es etnocentrismo el usar los mismos criterios de derechos humanos a toda la humanidad en su conjunto. No es etnocentrismo indicar que como persona que vivo en España, tengo todo el derecho de indignarme ante la política de Irán, y de proponer la destrucción del sistema opresor iraní. La razón es muy simple: Porque no veo una diferencia real entre un iraní y un europeo. Porque en el fondo, somos todos seres humanos. Lo vuestro, sin embargo, no es etnocentrismo, pero sí es una xenofobia. Una xenofobia, porque dividen la humanidad en base a sus "criterios culturales", por lo que existen "distintos tipos de humanos" dependiendo de donde son. Es esa la razón fundamental que critiqué en el blog de Buena Prensa el relativismo cultural, y su manía de generalizar las sociedades en base a ciertos criterios estereotipados de una cultura en específico, y negando la variabilidad de interpretación personal e individual de cada persona. En ese sentido, dependiendo de qué origen nacional tiene cada persona, su capacidad de adaptación, de aprendizaje, y de intercambio cultural varía, y se determina de forma casi tajante.

Someto a Irán a la crítica que merece ese país, algo que vosotros nunca harían, porque no quieren hacerlo. No quieren admitir los horrores de ese régimen fanático. No quieren admitir que en el fondo, existen cosas peores que Estados Unidos. Simplemente no quieren admitir que a pesar de todo, el mundo podría ser peor si Irán fuera más poderosa de lo que es. Yo, que tengo las ideas bastante claras sobre este asunto, no tengo ni un complejo al admitir esa realidad, a pesar del hecho que no encontrarían alguien más anti-imperialista que yo.

A lo mejor pensarían que deberíamos unirnos, en ves de dividirnos, para luchar contra el enemigo común que es el imperialismo norteamericano. Pero me temo que el enemigo común es muy distinto entre nosotros. Para vosotros, el enemigo es Estados Unidos a secas. Es su política, su chauvinismo, y su invasión a otros países. Mi enemigo nunca fue Estados Unidos, sino una cierta política de Estados Unidos, guiada no por un país entero, sino por una mera élite social. Lo mismo diría sobre Irán, que también tienen una élite poderosa basada en una opresiva casta de Ayatollahs y clérigos shi'ies, si no fuera que esa casta es totalmente irracional, guiada por principios dogmáticos que, como dije antes, sólo pueden ver blanco y negro.

Entiendo a Ahmadineyad que diga lo que crea de forma honesta. Pero vosotros son una escoria. Para vosotros, sus principios de donde sacan su indignación sobre los abusos del mundo no se aplican a todos por igual. Para vosotros, sí es aceptable indignarse plenamente a abusos de ciertos países (Estados Unidos e Israel), pero a otros no tanto (Irán). Para vosotros, no se puede cuestionar el sistema político y religioso iraní, porque los iraníes "son soberanos y han elegido eso", a pesar de que han aplastado cualquier forma de oposición al régimen, y los siguen persiguiendo de forma brutal. No estoy sólo hablando de kurdos, sino también de árabes, ba'hais y azeríes. Minorías que pueden llegar a un 30% de la población, y que están siendo sistemáticamente perseguidos y segregados por el sistema político de Irán.

Dicho de otro modo, se trata de un gobierno de mayoría manipulada, que oprime a minorías de todos los tipos. Ya sean minorías étnicas, religiosas o sexuales. ¿Es esa la soberanía que tanto admiran?

Un último asunto es sobre la intervención extranjera de Irán en oriente próximo. Aparte de los intentos de manipular la política iraquí, ¿acaso la creación de movimientos fanáticos como Hizballah o Jihad Islámica, y su financiación, no son intervensión extranjera? Claro que Estados Unidos lo hace incluso a mayor escala. Pero también tiene más poder para hacerlo, y más presencia. Rechazo la política de Estados Unidos por ser abusiva y destructiva. Y justamente por eso es mi deber criticar a Irán, y llamar a la destrucción de un sistema político que intenta crear la supremacía del Islam shi'í en Oriente Próximo como objetivo fundamental.

Todo lo dicho anteriormente indica algo claro. No existe izquierda que defienda, de alguna manera, a Irán. Los que apoyan cualquier política de la República Islámica para mantener el estado dogmático y fanático de ese sistema es, por obligación, parte de la extrema derecha religiosa. Lo digo porque es evidente la similitud entre lo que dijo Ahmadineyad, y lo que dicen los de www.esposibleelcambio.org, que como verán, son fanáticos religiosos católicos que también niegan la existencia de la homosexualidad como condición, y simplemente lo caracterizan como enfermedad deshumanizante.

Sinceramente,
-Alks "Gemeh Djeseret" Per-aa.